Ante las nuevas medidas brindadas por el Ejecutivo este miércoles, el gobernador regional de Madre de Dios, Luis Hidalgo Okimura, expresó su sorpresa por la inclusión de la región en el nivel de alerta alto, cuando departamentos con mayor incidencia de casos de COVID-19 han sido considerados en el nivel de alerta moderado.
"Para nosotros ha sido una sorpresa que nos incluyan en el grupo de riesgo alto. Loreto tiene mucha mayor incidencia y está en el grupo moderado", declaró a Radio Madre de Dios la autoridad regional. Asimismo, anunció que continuará con el compromiso de hacer cumplir las disposiciones del Estado, junto a los miembros del Comité Regional de Seguridad Ciudadana (Coresec)
Añadió que pedirá una explicación al respecto en la reunión pactada con la ministra de salud, Pilar Mazzeti, para este fin de semana, debido a las aparentes diferencias que existen entre los datos que se manejan a nivel nacional y regional.
La autoridad amazónica contó que el martes pasado, los gobernadores regionales del país tuvieron una conferencia virtual con la presidenta de la PCM, Violeta Bermúdez, para explicar la situación actual de cada una de las regiones. Sin embargo, ante el apuro de la premier por salir de casa, muchos gobernadores no tuvieron su turno para participar, lo que ha generado disconformidad entre las autoridades.
Resaltó que esta gestión, a diferencia de la anterior, no permite a los gobernadores comunicarse fácil y activamente con los ministros. Hidalgo criticó que en su mensaje a la nación, el presidente Francisco Sagasti no fuera claro respecto a las medidas que se establecieron y que, además, se retomen las restricciones vehiculares los días domingos, ya que a su parecer, existe más probabilidad de contagio en el uso del transporte público, el cual sí está permitido.
Cabe resaltar que la región Madre de Dios recibió la clasificación de “nivel de alerta alto”, por lo que la inmovilización social obligatoria será desde las 9 p. m. hasta las 4 a. m. y los días domingo, el tránsito vehicular estará restringido. El aforo en casinos, gimnasios, cines y teatros estará limitado a 30%; en el caso de los centros comerciales, galerías y tiendas será permitido un 40%; los restaurantes podrán atender al 50% de su capacidad y las iglesias, al 20%.