Queridos sacerdotes salesianos, queridos sacerdotes y voluntarios de la OMG, queridos hermanos y hermanas en Cristo:
El pasado lunes 3 de diciembre, me comunicaron la noticia del fallecimiento del P. Ugo de Censi. Inmediatamente se me vinieron a la cabeza muchas imágenes: los diferentes paisajes andinos de nuestras parroquias convencianas de Vilcabamba e Inkawasi, los rostros de las gentes sencillas que los habitan, los sacerdotes de la Operación Mato Grosso (OMG) de nuestro Vicariato y de otras jurisdicciones que he ido conociendo, los voluntarios que riegan los apostolados vinculados a la OMG, los cantos, el Mensaje…
No puedo quedar triste, más bien tengo que dar gracias a Dios por la vida del P. Ugo, por tanta bendición que a través de él llegó a nuestra tierra, por tantas personas que por su mediación se encontraron con Jesús y con María, su madre, Nuestra Madre.
P. Ugo, descansa en paz. Te lo has merecido. Sigue rezando por nosotros, sigue enviando cartas a tus sacerdotes y misioneros, animándoles, exigiéndoles, reconfortándoles. Disfruta de ese cielo que nos prometió Jesús y que tú tantas veces nos recordaste.
Nosotros quedamos aquí, con tu obra. Alegrándonos al ver la entrega gratuita y desinteresada de tantos jóvenes a quienes tú has inspirado este modo concreto de seguir a Cristo que es la OMG.
En nombre mío y de todo nuestro Vicariato, gracias Padre Dios, gracias Virgen María, gracias P. Ugo.
+David Martínez de Aguirre Guinea, OP.
Obispo Vicario Apostólico de Puerto Maldonado