A través de un comunicado oficial de la Conferencia Episcopal Peruana, los obispos del Perú se pronunciaron sobre la crisis política que vivimos. “El consenso social pide dar paso a una transición política que busque urgentemente una salida a la profunda crisis actual, priorizando la necesaria reforma política pendiente”, resaltaron, en principio.
Dirigiéndose al pueblo peruano y a sus instituciones tutelares, la Iglesia resaltó que no es ajena a nada de esta dura realidad nacional. “No cabe duda que estamos en un momento de profunda crisis social y política, que se manifiesta en una lucha interna entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, dañando gravemente la democracia y generando mayor división y conflicto, lo que conduce a un grave enfrentamiento entre peruanos y puede llevar a niveles incontrolables de violencia”, denunciaron.
“Es vergonzoso y decepcionante que el Perú sea uno de los cuatro países que registran el mayor índice de percepción de corrupción en América Latina, según el informe del Latinobarómetro en 2021. Esta crisis moral y ética engloba de manera directa a los actos de corrupción en las altas esferas de los poderes del Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como en otras instancias del Estado”, enfatizaron desde su escrito.
A su vez, señalaron que todo esto viene ocurriendo de espaldas a la crisis generalizada que afecta aspectos fundamentales de la vida de los peruanos, como la alimentación, la educación en la interculturalidad, los niveles de subempleo y la informalidad.
Sin embargo, se dijo la Conferencia Episcopal Peruano, “estamos a tiempo para trabajar juntos como sociedad peruana y enrumbarnos hacia un proyecto de país con un auténtico compromiso para el desarrollo humano integral de todos los peruanos: la ciudadanía no merece ver los espectáculos de enfrentamiento en y entre los poderes públicos, especialmente del Ejecutivo y Legislativo, pues la confrontación permanente profundiza su deslegitimación y la ciudadanía ya no se siente representada por ellos”.