Por: Beatriz García Blasco
El incremento de muertes por COVID-19 en la región Madre de Dios, que lleva días con un promedio de tres a cuatro decesos diarios a causa de esta enfermedad, se cobró el viernes 12 de junio la primera víctima referida desde una comunidad indígena de la región. Se trata de una mujer de 39 años que, en principio, no contaba con factores de riesgo.
La mujer había sido trasladada el sábado 6 de junio desde la comunidad nativa Palma Real, una de las únicas tres comunidades Ese Eja que existen en la región Madre de Dios y en el Perú. Dos días antes, el jueves 4, dada su sintomatología el personal de la posta de salud comunal le había realizado prueba rápida, pero dio resultado negativo.
Sin embargo, ya internada en el Hospital Santa Rosa de Puerto Maldonado se le realizó prueba molecular, que confirmó el contagio. Este hecho, unido a la alarma dada por los jefes comunales asegurando que habría más vecinos con síntomas compatibles con el COVID-19, hizo que un equipo de salud se trasladase durante la semana a Palma Real, realizando monitoreo y pruebas casa por casa durante dos días. De esas pruebas rápidas, solamente una dio positivo.
Este segundo paciente confirmado por prueba rápida es familiar directo de la fallecida, persona de avanzada edad y se encuentra internado en la Unidad de Cuidado Intensivos del Hospital Santa Rosa.
Cabe mencionar que, a pesar de que las pruebas rápidas dieron negativo, el personal de salud dejó tratamiento a aquellos pacientes que mediante análisis clínicos serían sospechosos por COVID-19 y se está a la espera de que entre el lunes o el martes lleguen los resultados de las ocho pruebas moleculares realizadas durante la visita. También se informa que en los primeros días de la semana se realizará una nueva visita a la zona, para monitorear la evolución de los pacientes sospechosos.
A través de redes sociales la comunidad nativa Palma Real ha alertado y lamentado profundamente esta muerte, que no ha sido informada oficialmente por las vías oficiales de comunicación de la DIRESA Madre de Dios, pero sí corroborada por fuentes dignas de todo crédito para este medio.
Mencionar que el pueblo Ese Eja en Perú está compuesta, según el censo de 2017, por 440 personas, aunque solamente 212 personas manifestaron en dicho censo que sabían hablar la lengua. Los Ese Eja habitan la cuenca del río Madre de Dios y la cuenca del río Beni, entre Perú y Bolivia.
La comunidad nativa de Palma Real es la tercera de la región Madre de Dios que cuenta con casos positivos confirmados por Covid-19 después de Santa Teresita (pueblo Yine) y Tres Islas (pueblo Shipibo).
