Abordada por su responsabilidad en la crisis educativa en Madre de Dios, la directora regional de Educación, Gladys Quispe, defendió su gestión y cargó de responsabilidad al Poder Ejecutivo. La derivación de maestros a nuevas localidades de la región irá mitigando problemas que afectan al año escolar, prometió la principal funcionaria del sector educativo regional.
“Este año hemos recibido profesores nombrados de distintas regiones, estos luego han renunciado y ha hecho que los directores no encuentren profesores, luego estos han acudido a la Dirección Regional de Educación (DRE) y han descubierto que sí ha sido adjudicadas las plazas, pero que el profesor no llegó al colegio, encima cobrándole el Estado”, recordó Quispe.
“Estamos dando soluciones a corto plazo, atendiendo con algún profesor más; pero lo estamos viendo con calma, hay colegios donde no requieren tres o cuatro profesores, sino uno. El proceso de racionalización y al profesor lo movemos al colegio que sí lo necesito, ese proceso demora entre 10 y 15 días”, indicó también la directora, de cara al futuro inmediato.
Frente a otro tipo de problemas, Quispe aseguró que habrá tranquilidad. “Ahorita no hay problema de pagos; el año pasado hubo porque desde el Minedu nos aprobaron 90 plazas y solo nos dieron para 43 y tuvimos que atenderles a los demás con nuestro presupuesto; hubo meses en las que tuvimos que restringir otros servicios para pagarles a los maestros”, aclaró. “Pero este año ya no va a haber dificultad en cuanto a pagos”, aseveró.
Quispe dijo tener confianza en su equipo de trabajo y que este se adecúa a las políticas generales de la gestión de Luis Otsuka. “El equipo está trabajando conforme a lo que queremos, de acuerdo con la política de cero corrupción y estamos encaminados a atender a los colegios. Estamos contentos con el desarrollo, hay que hacer algunos ajustes, pero no hay desconocimiento sino falta de tiempo”, señaló.