Tras una reunión entre distintas autoridades para hablar sobre la marca Madre de Dios, del proyecto “Terramaz”, su coordinadora técnica, Cristina Rosero, comentó que este tipo de trabajos se aplican también en otros países o regiones, siempre con el objetivo de luchar contra la deforestación y de impulsar las iniciativas locales que vayan de la mano del desarrollo sostenible y la construcción de una identidad.
Rosero aseveró que son conscientes de los conflictos presentes en la región y que por ello buscarán el diálogo entre distintos actores o instituciones para encontrar caminos de solución, con el fin paralelo de crear un sentido de pertenencia o de territorialidad.
La especialista también resaltó la potencialidad turística de la región y de la capacidad productiva de pueblos indígenas o de cadenas productivas invisibilizadas, como las de las mujeres artesanas. Rosero aseguró que existen muchas más ventajas que desventajas en la región amazónica.
Por otro lado, el consultor contratado para la construcción de la marca, Marc Piraux, recalcó que el trabajo no solo se trata de la creación de una imagen, sino que esta permitirá la revalorización de los productos y servicios que brinda la región, otorgando valor agregado a estos y no dejando de promocionar la conservación del medio ambiente.
El asesor comunicacional dijo estar sorprendido por el potencial productivo de las comunidades de Madre de Dios, así como de la biodiversidad y de la posibilidad de coordinación entre todas las partes que se involucren en el proyecto.