El Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) otorgó el reconocimiento oficial a 78 conocimientos tradicionales de la comunidad nativa Boca Pariamanu, del pueblo indígena amahuaca, ubicada en la cuenca del río Las Piedras, en Madre de Dios.
Durante una ceremonia, en la sede del Indecopi en Lima, Alberto Inuma, presidente de Boca Pariamanu, recibió los documentos oficiales que otorgan una protección efectiva a los conocimientos tradicionales heredados de generación en generación, de manera oral, por el pueblo amahuaca.
El encargado de hacer la entrega del reconocimiento oficial fue el presidente del Indecopi, Alberto Villanueva. En la ceremonia también participó una representante de la SPDA, organización que apoyó a la comunidad nativa de Boca Pariamanu durante el proceso de reconocimiento.
Respecto a la protección legal conseguida, Alberto Inuma, quien además es el encargado de curar a los enfermos de su comunidad y un destacado conocedor de plantas medicinales en Madre de Dios, indicó que los conocimientos tradicionales fueron aprendidos de generación en generación y a través de la oralidad.
De este modo, los conocimientos tradicionales de Boca Pariamanu están protegidos legalmente, garantizando que su comunidad pueda conservar y gestionar este valioso legado cultural.
“Ahora nosotros hacemos este reconocimiento para el beneficio de la comunidad. Todas estas plantas salen del bosque de la comunidad”, refirió Inuma
El líder indígena también sugirió que se continúe realizando el registro de otros conocimientos tradicionales. “Le diría al Estado peruano que siga reconociendo en otras comunidades los usos y los nombres de las plantas medicinales”.
Con este nuevo reconocimiento, el número total de conocimientos tradicionales registrados en Madre de Dios asciende a 494. Otras comunidades nativas de la Amazonía peruana han logrado culminar este proceso ante el Indecopi, como Santa Rosa de Huacaria, Infierno y Shintuya.
Importancia del registro
Para Eddy Peña, especialista en Conservación y Pueblos Indígenas de la SPDA, es “fundamental” registrar los conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas para “proteger y preservar su patrimonio cultural”.
“El registro fortalece el reconocimiento legal a los saberes ancestrales, lo que garantiza que la comunidad siga teniendo la capacidad de decidir sobre su uso, evita la apropiación indebida o usos que distorsionan su manera de usarlos. Además, abre la puerta a la valorización de dichos conocimientos como activos estratégicos para el desarrollo sostenible, ya sea por el conocimiento de plantas medicinales o los diferentes usos que le dan a los recursos biológicos”, sostuvo.
El especialista también resaltó que con el referido registro podrán beneficiarse económica o socialmente del uso comercial de dichos saberes, siempre que su acceso se realice en base a un consentimiento previo a través de un acuerdo.
Por otro lado, comentó que el registro fortalece y salvaguarda la identidad cultural, ya que al estar registrados de manera confidencial solo ellos pueden tener acceso para la transmisión de conocimientos a otras generaciones en el caso de que este proceso se interrumpa en algún momento.
Cabe recordar que el Indecopi ofrece dos modalidades de registro: un Registro Público y un Registro Confidencial. El Registro Público incluye datos e información que ya están en el dominio público, sistematizados por el Indecopi, y cuya utilidad radica en prevenir el otorgamiento de derechos de propiedad intelectual sobre invenciones derivadas de estos conocimientos sin respetar la legislación nacional.
Por su parte, el Registro Confidencial resguarda aquellos conocimientos tradicionales que las comunidades indígenas consideran sensibles y que deben mantenerse en secreto. Esta confidencialidad permite proteger dichos conocimientos bajo la figura de ‘secretos comerciales’, conforme a la Ley 27811, brindando una herramienta legal para prevenir accesos o usos no autorizados.
Boca Pariamanu
La comunidad nativa Boca Pariamanu, única comunidad del pueblo amahuaca en Madre de Dios, está conformada por más de 20 familias que basan su subsistencia en actividades sostenibles como la agricultura y el turismo. Su conexión con el bosque y sus conocimientos ancestrales les ha permitido desarrollar una relación de profundo respeto y aprovechamiento sostenible de los recursos naturales, destaca Peña.
“Sus conocimientos sobre las propiedades curativas de los recursos biológicos, especialmente de las plantas, han sido desarrollados a través de siglos de investigación y experimentación, transmitidos oralmente de generación en generación. Esto ha influido profundamente en su cultura, en la gestión de su territorio y en el aprovechamiento de sus recursos”, agregó.
Actualmente, según el especialista de la SPDA, la comunidad es pionera en priorizar un modelo de aprovechamiento basado en la conservación de sus recursos. Este enfoque se manifiesta en actividades como la recolección sostenible de frutos de palmeras y la castaña, así como en la promoción del ecoturismo como una alternativa a la extracción de madera y al cambio de uso de suelo.
Fuente: Actualidad Ambiental