El agradecimiento de parte del vicario apostólico de Puerto Maldonado, Monseñor David Martínez de Aguirre, no tardó al llegar las primeras colaboraciones económicas de las personas que desean apoyar la continuidad de la casa de acogida de ancianos ‘Apaktone’. Sin embargo, lamentó que hasta la fecha no se concreten los compromisos de varias instituciones públicas respecto al sostenimiento del asilo.
“La gente es solidaria, hay muchas donaciones de alimentos, de la gente de a pie; es un compromiso bonito”, agradeció el obispo.
Pese a ello, no dudó en enfatizar que “las ayudas nos permiten salvar la situación del mes de abril, o de mayo, pero no tenemos asegurada la situación del mes de junio, entonces, si bien esas ayudas nos llegan, no las tenemos aseguradas, por lo tanto, seguimos en una situación de alarma grande, porque no tenemos asegurado el mes de junio, y peor si no logramos el compromiso de las instituciones locales, que solo son compromisos”.
“A veces uno tiene la sensación de que los abuelitos quedan en el último lugar”, dijo el obispo tras transcurrir un mes desde que entidades como el propio Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) se comprometan a gestionar transferencias económicas a favor de la casa de acogida.
“Los primeros días de mayo se hicieron los acuerdos. Cada institución ya debería tener estudiado qué es lo que puede hacer y qué no, ha habido un tiempo prudencial”, manifestó la autoridad eclesiástica, urgida por la llegada del mes de junio sin ninguna partida presupuestal garantizada.