Por: Wuilmar, Briceño Rueda
Walter Zorrilla, de la Comunidad Nativa Diamante, provincia de Manu, en Madre de Dios, es uno de los hijos de Víctor Zorrilla Etene (71), un anciano asesinado por los mashco piro -personas que viven en aislamiento, conocidos también como los 'no contactados- el pasado 24 de febrero, luego de recibir tres flechas de bambú en el cuerpo.
Este nativo, junto a varios miembros de su familia -todos de la etnia yine-, estuvieron los días miércoles 7 y jueves 8 de marzo en diversas reuniones con representantes del Ministerio de Cultura y regionales, de los sectores de salud, vivienda, agricultura, etc. en Puerto Maldonado, para llegar a un acuerdo sobre el conflicto que vive su comunidad con los mashco piros.
Esta familia acusó a los agentes del Ministerio de Cultura de haber generado una actitud hostil y violenta en los 'mashco piro' contra la Comunidad Nativa Diamante. "Los agentes dijeron (a los mashco piro) que nosotros somos malos. Por eso ellos están bien agresivos", señaló Walter Zorrilla.
La agresividad a la que se refiere Zorrilla la vio reflejada en el cuerpo de su padre después de buscarlo junto a otros 25 comuneros por más de nueve horas el domingo 25 de febrero. Herida de flecha en la espalda, otra en el pecho -que llegó a uno de los pulmones-, y una tercera flecha en el abdomen; fracturas en los huesos del cráneo y el cuello roto; y el arrancamiento de los ojos fue el resultado de la necropsia practicada en Cusco.
Ley que protege a los ‘no contactados’
La Ley para la protección de pueblos indígenas u originarios en situación de aislamiento y en situación de contacto inicial (N°28736), se encuentra vigente desde el año 2006 y tiene como unas de sus prioridades, a favor de los ‘no contactados’, “proteger su vida y su salud desarrollando prioritariamente acciones y políticas preventivas, dada su posible vulnerabilidad frente a las enfermedades transmisibles” y “respetar su decisión en torno a la forma y el proceso de su relación con el resto de la sociedad nacional y con el Estado”, entre otros objetivos.
A través del Ministerio de Cultura, con el fin de salvaguardar la integridad de los mashco piro, se creó en el 2015 el “Plan de Atención Especial para indígenas Mashco Piro presentes en las playas del Alto Madre de Dios”, para tener un contacto controlado. Aunque, ni bien se implementó, la Defensoría del Pueblo hizo eco a la alerta emitida por actores locales y especialistas en el tema sobre los posibles impactos sociales que podría generar este plan, así como el cuestionamiento a la falta de planificación y presupuesto para su sostenibilidad.
Una de las implementaciones del plan consistió en colocar, en puntos estratégicos, a agentes de protección. Sobre el trabajo de estas personas, Angela Acevedo, titular de la Dirección General de Derechos de los Pueblos Indígenas del Ministerio de Cultura, comentó que una de las funciones de los agentes es pedirle a los mashco piro no acercarse a determinadas zonas por ser “peligrosas”. “Es la forma de que no se muevan. Nosotros lo que estamos tratando, en la medida de lo posible, es que no haya un desplazamiento del grupo mashco piro a otras zonas donde puedan ponerse en peligro, ellos y los terceros”, explicó la funcionaria.
Sobre la denuncia de los familiares de Víctor Zorrilla, Acevedo aseguró que se va a “evaluar y revisar” el posible mensaje dado a los mashco piro (los comuneros de Diamante “son malos”). Aunque, el único fin de los agentes habría sido evitar contacto con foráneos y así no contagiarse de enfermedades a las cuales no tienen inmunidad. Los agentes, indicó Acevedo, les han pedido a los 'no contactados' en reiteradas ocasiones acercarse solo a los puestos de control ‘nomole’ cuando necesiten alimentos (yuca, plátano y caña).
Asimismo, señaló que el Ministerio de Cultura aún no sabe el motivo por el cual los mashco piro han reaccionado violentamente, pues en otras oportunidades tuvieron acercamiento, incluso, con personas que no eran de la comunidad: turistas que pasaban en botes y les entregaban alimentos y ropa de vestir.
Lo que sí tiene claro este sector y es la razón por la que insisten en que solo sean los agentes los únicos en contactarse -según su página web-, es que los ‘no contactados’ “tienen muy pocas o nulas defensas para resistir el contagio a bacterias o virus que para el resto de la sociedad son enfermedades fáciles de curar, como la gripe o un resfriado, lo que les puede causar fácilmente la muerte.”
Agentes no dominan por completo la lengua de los mashco piro
Si bien los agentes -en su mayoría de la etnia yine, de la cual provienen los mashco piro, quienes en algún momento se separaron de su etnia producto de la explotación del caucho- son los únicos autorizados en comunicarse con los ‘no contactados’, aún les queda pendiente entender todas sus palabras. Antonio Trigoso, agente de protección, hizo dos pedidos a las autoridades: aumentar el número de sus colegas y capacitarlos para interpretar las palabras que desconocen. De esta manera, se cuidará el acceso a la Comunidad Nativa Diamante y se evitarán malinterpretaciones, como la que aducen los familiares de Víctor Zorrilla.
FENAMAD pide al Ministerio De Cultura investigar a los agentes
Frente a la denuncia de los familiares de la víctima, el presidente de la Federación Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes (FENAMAD), Julio Cusuruchi Palacios, pidió al Ministerio de Cultura investigar y esclarecer los hechos. “Nosotros como FENAMAD hemos llegado a la conclusión de que si es verdad (la denuncia) Cultura debe sancionar”, señaló Cusuruchi Palacios, quien fue alertado por los comuneros, cuando llegaron a Puerto Maldonado, sobre el mensaje de los agentes a los mascho piro. “No vamos a permitir que esto pase y como autoridades ellos tienen un reglamento. Y este tema de confundir, no es una buena intención.”
Piden declarar la comunidad en zona de emergencia
Gloria Palma, jefa de la Comunidad Nativa Diamante, exhortó a las autoridades a declarar en zona de emergencia su comunidad. De esa manera se harían gestiones a la brevedad y se evitará la posible llegada de los mashco piro, quienes luego de la muerte del septuagenario se han apoderado de las tierras que utilizaba la comunidad como chacra. Este último problema llevó a la comunidad pedir alimentos a las autoridades regionales.
El inicio de clases es la mayor preocupación de la dirigente. Se teme que los estudiantes se encuentren con los ‘no contactados’ en el trayecto a sus escuelas. A esta preocupación se suma la temporada en la que el nivel del río baja. Cuando ocurra, los mashco piro tendrán libertad para ingresar a la comunidad, ya que el río es la única causa por la cual no lo hacen en este momento.
