El alcalde de la Municipalidad Distrital de Laberinto, Marcos Otazu Huaccoto, falleció el sábado pasado a la 1:30 de la tarde por insuficiencia respiratoria aguda producida por el COVID-19, en el hospital de EsSalud Victor Alfredo Lazo Peralta de EsSalud, en Puerto Maldonado, luego de permanecer cerca de dos días internado en situación crítica. Este es el primer caso en la región Madre de Dios de una autoridad edil que es víctima del coronavirus.
En entrevista para radio Madre de Dios, el gobernador regional Luis Hidalgo Okimura, envió sus condolencias a la familia por su pérdida. Asimismo, explicó que se enteró de la noticia un día después de su deceso, es decir, ayer domingo, mientras se encontraba en el puente Inambari coordinando labores de supervisión en la frontera.
"Hace tres noches (el jueves) personas cercanas al alcalde me llamaron y me dijeron que había sido llevado al seguro social pero no lo querían recibir. He tenido que pedirles que lo lleven al hospital Santa Rosa para que le atiendan de emergencia (...) la información que posteriormente me han pasado es que estaba internado y en tratamiento, no tenía conocimiento de que fuera paciente Covid", manifestó Hidalgo.
Además, el gobernador señaló que en la llamada le indicaron que Otuza había fallecido 'recientemente'. Sin embargo, cuando pidió información sobre las circunstancias de su deceso, le explicaron que se había producido el sábado y que incluso el burgomaestre ya había sido enterrado. Todo esto, sin informarle a sus familiares.
"A mi me avisan 24 horas después (...) Llamé al director del Seguro Social, quien me informó que el deceso había ocurrido el sábado y que incluso ya había sido enterrado. Ante eso me he quedado frió y sorprendido porque la información era que los familiares se habían enterado recién un día después. Esta es una situación que hay que lamentar, porque si así hablamos de una autoridad, imagínate de un ciudadano, son cosas que no deben pasar", expresó Hidalgo Okimura.
