El representante del Gobierno Regional de Madre de Dios, Enrique Muñoz, calificó el taller de presupuesto participativo 2017 como una “jornada ardua y pesada” que concluyó con la priorización de los proyectos que "la población considera necesarios para el desarrollo de la región".
El funcionario se refirió al retiro de los burgomaestres de la reunión del presupuesto participativo, quienes solicitaban la presencia del gobernador regional, Luis Otsuka. “Entiendo el malestar de los alcaldes, de repente tenían una expectativa de tratar este tema desde un punto de vista más político cuando en realidad es un trabajo técnico”, señaló.
Muñoz indicó que este accionar por parte de los alcaldes no dificulta el diálogo entre el Gobierno Regional de Madre de Dios y los municipios. “Las puertas de la gobernación siempre estarán abiertas para trabajar de manera coordinada por la región”, subrayó.
Por otra parte, declaró que el taller de presupuesto participativo se trabajó por ejes temáticos y los que despertaron el mayor interés de la población fueron los de educación, salud y transportes. “Existe una brecha de infraestructura en la región y se espera que con la ejecución de los proyectos que se han priorizado, eso se pueda reducir”, añadió.
El asesor jurídico del Gobierno Regional de Madre de Dios, se refirió también al anterior comité de vigilancia, presidido por Ricardo Ladera Susuki, quien días antes había denunciado que no se le habían brindado las facilidades para poder cumplir correctamente sus funciones.
“Debemos entender las funciones de vigilancia. Tengo entiendo que el señor Ladera Susuki solicitaba que se le asigne una camioneta y equipos de cómputo para que pueda realizar sus labores. Se debe tener claro que ellos no son servidores públicos, ni funcionarios, por tanto, no les podemos asignar bienes de propiedad estatal para sus funciones”, finalizó.
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