Un niño de 10 años, que sufriera graves quemaduras en un incendio durante el último fin de semana, no pudo ser trasladado a la ciudad de Lima para que sea atendido por los especialistas respectivos y falleció en el principal nosocomio de la región.
“Faltaba la aceptación de la cama. Pasando el mediodía es aceptado el niño en el Instituto (Nacional de Salud del Niño) y se está tramitando desde esa hora la llegada del avión que va a llevar a este paciente a la ciudad de Lima”, dijo Jorge Luis Asencios, director del Hospital Santa Rosa.
Por su parte, Julián Huari, padre político del menor, contó que a su familia le ha tocado dormir un par de noches en el Hospital Santa Rosa debido a la situación sanitaria del niño con quemaduras y por cómo quedó su vivienda tras el siniestro; motivos por los cuales, dejó un número de teléfonos para que la población pueda ayudarlos si así lo desean.
“Hemos amanecido aquí, cuidando a mi hijo. Si personas de buen corazón desean apoyarlo se les agradece, el número de teléfono es 901 286 221 de la madre, la señora Juana Corrales” agregó.
Finalmente, la hermana del menor fallecido reflexionó sobre lo difícil que son los traslados médicos hacia Lima cuando no se conoce a nadie en la capital peruana, pero son riesgos que se asumen para enfrentar las carencias del sistema de salud en provincia.
“No tenemos familiares allá en Lima. Estamos planeando qué hacer, dónde quedarnos y cuánto tiempo va a estar porque no solo va a estar un día. No se sabe si se va a recuperar o va a seguir en la clínica”, expresó.