Llegada de alimentos no atenúa problemas de Iñapari tras una semana de lluvias
La complicada situación que atraviesa la localidad de Iñapari, en la provincia de Tahuamanu, luego del desborde de los ríos Acre y Yaverija, es objeto de preocupación para las autoridades locales, quienes aseguran estar coordinando la evacuación de personas damnificadas, así como el envío de vehículos y alimentos. Sin embargo, muchos pobladores afectados aún expresan su indignación por la demora de dicha ayuda.
Según una nota de prensa oficial, se brindó atención integral a 62 familias en el albergue temporal del parque Bernardo Cardozo, con la entrega de Bienes de Ayuda Humanitaria (BAH), agua potable y vestuario. Además, se continúa atendiendo a la población con el suministro de agua potable a través de 2 cisternas desde Puerto Maldonado, y la distribución de alimentos tanto en ollas comunes como en otros albergues y la Comunidad Nativa de Bélgica.
Pese a ello, los pobladores aún se sienten agobiados. “Lamentable la situación, espero que el gobierno declare en emergencia este distrito tan importante. Necesitan apoyo urgentemente en la parte logística y sanitaria. Estoy impactado por la inundación, para no creerlo. Debe haber algún plan del gobierno a nivel local y nacional”, dijo uno de ellos.
Una ama de casa, desde redes sociales, expresó sentirse indignada con Defensa Civil, cuyo personal supuestamente no hace muchos esfuerzos por auxiliar a algunos pobladores. “Está destruido Iñapari. Han venido de Defensa Civil y solo han pasado con su canoa tomándose fotos y vídeos sin ayudar a las personas”, señaló.
Enrique Muñoz Paredes, gerente general de Gobierno Regional de Madre de Dios, insistió en que, desde su gestión, “hemos movilizado desde el día 21 maquinaria para evacuar a la población, hemos acompañado con vehículos y un bote. Estamos presionando con la Oficina Descentralizada de Defensa Civil para analizar los daños, y se coordinó con Emapat para que haya agua potable de manera permanente”.