La campaña de vacunación para combatir la peste porcina clásica en animales que conforman la producción ganadera se paralizó en Madre de Dios y otras regiones amazónicas. Para el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) estas se encuentran, hoy por hoy, fuera de peligro.
De acuerdo a John Aguinaga Arriaga, jefe del área de Sanidad Animal de Senasa en Madre de Dios, el 7 de noviembre se decidió declarar a algunas regiones del país como libres de esta enfermedad. “El hecho es que no se viene presentando la peste por un tiempo prolongado, es decir, se cumplió uno de los objetivos de este proyecto de control de enfermedades porcinos”, afirmó.
Pese a ello, Aguinaga resaltó que no se dejará de practicar actividades de vigilancia y control. “Incluso es van a instalar puestos de control en los límites fronterizos para evitar que ingresen (animales con enfermedades) a estas zonas libres”, dijo.
“Para estos dos meses se va a contratar personal que se va a dedicar exclusivamente a la vigilancia; capacitar a productores; la movilización deberá hacerse con certificado de tránsito interno; se tendrá que evitar comprar animales sin saber la procedencia ni estado sanitaria”, señaló.
“Nosotros también mantenemos la vacunación en otras especies como vacunos, seguimos la vacunación contra carbunco sintomático y contra rabia bovino. Sobre enfermedades endémicas venimos realizando campañas todos los años”, agregó el especialista.
Aguinaga catalogó a la peste porcina clásica como una enfermedad de gran importancia económica, de distribución muy rápida y que causa directamente la muerte, con sintomatología como fiebre, estreñimiento, diarrea o manchas rojizas en la piel del animal.
Mientras que el carbunco sintomático es una enfermedad bacteriana que a los vacunos les produce una cojera, formándose un edema en los miembros delanteros o posteriores.
“Queremos mantener nuestro estatus sanitario, queremos evitar que haya ingreso de otras enfermedades. No solo puede ser carbunco, sino otra enfermedad de cada país que no exista acá y causa un problema económico importante”, recalcó el jefe de Sanidad Animal en Senasa.
