Formalización minera: Otsuka no firmará pacto entregado por el Ejecutivo

En el marco de la Inauguración de la ceremonia por la primera piedra de la obra del nuevo puente de hierro con el que contará la comunidad de Isuyama en el Corredor Turístico de Tampopata, el gobernador regional de Madre de Dios, Luis Otsuka Salazar, aseguró que, aunque tiene la disposición y las condiciones para iniciar el proceso de formalización minera, no firmará el pacto redactado desde Lima porque no le parece que cumplan con las condiciones establecidas.

Otsuka Salazar aseguró que se tiene la capacidad de formalizar a los mineros que están a la espera de que se firme el convenio, sin embargo, aseguró que la culpa no es suya sino de las normas las cuales consideró que traban y entorpecen los procesos, asegurando que esta responde a los grupos que tienen mucho poder económico y las ONG que lucran de una forma constante.

“No es que yo no quiera firmar, solo hay que destrabar esas normas y todo seguirá un buen curso. Esperemos a ver qué pasa de forma positiva. Yo jamás mancharé mis manos con la corrupción y con un dinero que no es mío. Nunca me he metido en la corrupción ni lo haré jamás porque soy un hombre de una muy buena formación” dijo

Corredor Turístico de Tampopata,

El gobernador se refirió al proyecto del puente que asegura terminar antes de las fiestas de Navidad, “vamos a trabajar día, noche y madrugada hasta que el cuerpo ya no pueda más, es una promesa y con esto estoy demostrando que amo el desarrollo. Esta población necesitaba este puente y yo al salir de esta gestión se los estoy dejando. Ojalá que el que venga a mandar como gobernador sepa gestionar los recursos", declaró a medios locales.

“Estamos saliendo de un viejo puente de madera construido por mi hermano, que en su momento considero que era lo mejor. Siempre fue un sueño inclusive por el fundador de la comunidad, el señor Isuyama, y hoy, luego de tantos años, esto se está haciendo realidad para el beneficio de todos ustedes”, dijo Otsuka.

Finalmente, aseguró que deja obras como colegios y la avenida Alameda con un presupuesto acorde para que la nueva autoridad regional que venga a sustituirlo pueda avanzar en la proyección de una nueva Madre de Dios, llena de oportunidades y progreso.