Detienen a exgerentes forestales de Madre de Dios implicados en tráfico ilegal de madera
Agentes de la División de Investigación de delitos de Alta Complejidad (Diviac) de la Policía Nacional del Perú, en un operativo conjunto con la Fiscalía Especializada en Corrupción de Funcionarios, lograron la captura de 14 miembros de la presunta organización criminal "Los hostiles de la Amazonía", que era integrada por exgerentes regionales forestales y de Fauna Silvestre de Madre de Dios, y otros funcionarios.
Según las investigaciones, esta organización criminal operaba desde el año 2016 en la región Madre de Dios, realizando documentación que daba la apariencia de legalidad para el transporte de madera. Su modus operandi consistía en blanquear (legalizar) madera, es decir, al tratarse de documentos oficiales (sellados y validados por la autoridad forestal), se hacía más sencillo eludir mejor los controles forestales.
Entre los detenidos fueron identificados Robert Richard Nishida Añez, alias el “Chino” y Milagros del Carmen Ruiz Pizango, antiguos encargados de la Gerencia Regional Forestal y de Fauna Silvestre de Madre de Dios. Asimismo, también se detuvo a Gerson Sánchez Díaz, exjefe del Puesto de Control de El Triunfo, y Edel Karina Diaz Martinez, antigua encargada de Nodo CIEF.
Los 14 capturados afrontarían denuncias penales por delitos ambientales (contra los rencursos aturales, tráfico ilegal de productos forestales maderables), delitos contra la administración pública (corrupción de funcionarios, cohecho pasivo propio y cohecho activo genérico), delito contra la fe pública (falsificación de documentos en general) y contra la tranquilidad pública – organización criminal.
Para realizar el allanamiento de los 21 inmuebles, participaron un total de 180 policías y 25 fiscales, quienes también incautaron documentos de gran relevancia y teléfonos celulares. Esta operación estuvo a cargo del coronel PNP Jorge Gonzáles Quispe, jefe de la Diviac, y se realizó en conjunto en las ciudades de Puerto Maldonado y Cusco. El plan fue ideado desde Lima debido a la complejidad y la reserva que ameritaba.
El tráfico ilegal de madera es un negocio millonario que es posible por la colusión entre mafias, autoridades forestales, tramitadores, transportistas y muchas veces de malos elementos policiales. Hasta la fecha, el Perú ha tenido cerca de 300 millones de dólares como pérdida económica anual debido a la tala ilegal.