Hallado el cadáver del indígena yine que tuvo encuentro con aislados mashco-piros
Por: Beatriz García
A la espera de una comunicación oficial por parte del Viceministerio de Interculturalidad, la Federación Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes (FENAMAD) para la que trabajaba Héctor Sandoval como agente de protección ya ha dado públicamente, sin entrar a detalles, sus condolencias. Y es que el día de ayer se confirmó el hallazgo del cuerpo sin vida de Héctor Sandoval Ruiz, de 29 años, comunero de Puerto Nuevo, comunidad del pueblo yine a orillas del río Piedras. Como se recuerda, el pasado 14 de abril, al promediar las 11 am, Sandoval habría tenido un encuentro con indígenas del pueblo aislado mashco-piro cuando estaba pescando en la quebrada Lidia Grande en compañía de un menor de edad. El niño fue quien, ante el suceso, logró huir y llegar hasta la comunidad más cercana, Monte Salvado, y dar la voz de alarma.
El cuerpo de Sandoval se halló en la misma quebrada donde se habría dado el encuentro, a 30 minutos de surcada, según refieren comuneros de la zona. “Estaba en la palizada, ya llevaba varios días”, indica el vicepresidente de Puerto Nuevo, Gilbert Zevallos. Además de eso, el cuerpo habría sido encontrado con dos extremidades, aparentemente, amputadas, así como otros signos de descomposición posiblemente fruto de su exposición de varios días a los animales carroñeros.
A la tristeza por lo sucedido, se suma el miedo y la indignación. Desde la zona, Puerto Nuevo tiene comunicación constante, mediante el sistema de internet instalado por el Ministerio de Cultura, con sus vecinos de Monte Salvado y, desde allí, les han comunicado la dirección que, en base a las huellas y otros signos, habría tomado el grupo de aislados. “Hemos visto huellas a media hora de aquí, nos sentimos muy amenazados, no tenemos combustible ni medicinas. Yo quisiera que ustedes como medio difundan esto. Nosotros protegemos a los aislados y no tenemos garantía de vida. Ahora con la muerte de un hermano, ya no sabemos qué hacer”, relató Zevallos para Radio Madre de Dios.
Además, indica que Héctor Sandoval era el sustento de su familia gracias a sus labores como agente de protección de la FENAMAD, pues mantenía a sus padres y a un hermano que estudia en Puerto Maldonado. El representante de Puerto Nuevo también, en su comunicación, clamó ayuda de las autoridades: “En este momento que estamos en pandemia no tenemos ningún apoyo de las autoridades, estamos abandonados y no sé si ustedes pueden ver con Cáritas, si podrían acercarnos algo. Somos más de 26 familias, ya no tenemos víveres. Queremos el apoyo porque estamos temerosos en estas circunstancias”.
Desde la zona también cuestionan el actuar del Ministerio de Cultura: “Se ha muerto uno de nuestros hermanos, mañana seremos otros. A pesar de que nosotros protegemos a los aislados, seguimos los protocolos, pero nosotros no tenemos ningún seguro”. Cabe recordar que horas después del encuentro entre Sandoval y los aislados, el último 14 de abril, la directora de Pueblos Indígenas en Aislamiento y Contacto Inicial (PIACI), Nancy Portugal, indicó en entrevista con Radio Madre de Dios que se estaba recabando la información para, de acuerdo a protocolos de seguridad y en el contexto del estado de emergencia que rige en todo el país, atender a las comunidades de la zona. Sin embargo, cinco días después del encuentro una sobrina de Sandoval, en redes sociales, urgía ayuda asegurando que “nos sentimos abandonados por parte de las autoridades, por favor pedimos ayuda urgente para encontrarlo y esperamos que las entidades del Estado se pongan la mano al pecho para que nos ayuden a rescatarlo”.
Los restos mortales de Héctor Sandoval han sido velados en las últimas horas por sus vecinos de Puerto Nuevo. Alrededor de las 3 de la tarde de hoy, su cuerpo fue enterrado en un ataúd construido por la comunidad.